Hoy hemos asistido a la Misa en la Iglesia de S. Salvador, donde los Franciscanos tienen la Custodia de la Tierra Santa. Hemos concelebrado los sacerdotes españoles y los que se encuentran aquí, siendo el Celebrante principal el P. Artemio. Estando presente el Cónsul de España en Jerusalén, Sr Ramón, que como el nos decía de los pocos políticos que defiende la Fe Cristiana e intenta dar testimonio de ella.
El P. Artemio en la Homilía nos dijo que María nos señala el camino de cómo seguir a Jesús y a ser auténticos cristianos.
En Ibero América, no hay duda que la presencia de María, como Pilar de la Fe ha unido y sigue uniendo a muchos pueblos hermanos y es la que crea espacios en el corazón para aceptarnos en las diferencias y sentirnos arropados por la Misma Madre en sus diversas advocaciones.
¿Quien, sino María, es la que más se siente en el corazón de nuestros Pueblos hermanos, en los momentos de decaimiento, de sufrimiento, de cruz? Es por la Fe en el Amen, por la actitud de servicio, por estar siempre al lado de los que sufren, la intercesora por excelencia de nuestras vidas, la que acepta en el silencio de la confianza incondicinal la voluntad de Dios, la que nos enseña y acompaña en la oración, la mujer valiente de la Biblia. Ahí tenemos el modelo y la compañera de camino para ser auténticos cristianos seguidores de Jesús.Pidamos a Nuestra Madre: FORTALEZA EN LA FE, SEGURIDAD EN LA ESPERANZA YCONSTANCIA, PERSEVERANCIA EN EL AMOR.
Abramos las puertas de nuestras vidas por donde nos podamos encontrar, hombres de toda raza, pueblo y nación, como en esta puerta de las murallas de Jerusalén.
Un abrazo
Chema sds.