26 octubre 2010
Toda la comunidad, nos fuimos a S. José, donde la Diócesis tiene un centro de paseo, convivencias familiares, pasar el día, en un lugar donde hay un criadero de Truchas, que administra sabiamente Emilio.
De camino cerca de Ixchiguan, paramos a ver la Piedra partida, desde donde se contempla un maravilloso paisaje.
Dos hombres contemplativos, en la foto, aunque los 5 estábamos contemplando el paisaje, un tanto nublado el día, pero había que aprovecharlo.
Ahí estamos en la Piedra partida donde los Indígenas todavía tienen ahí algunas celebraciones, y ritos de sus ancestros, posiblemente de los Mayas, que tienen muchas comunidades diversas en idiomas y costumbres.
Seguimos un camino de terracería (destapado, de piedra y arena) hasta salir a la carretera y seguir el viaje a S. Jose de Ojetenán, que significa “Pueblo viejo”
Ahí hemos visto el criadero de truchas, las diversas etapas desde la sacada de los huevos, criadero, las pequeñas, las medianas y las grandes en diversos estanques, hasta tener los tamaños que solicitan para la venta.
En uno de los estanques, está preparado para que se pueda realizar un paseo en barca.
“Adiós tristeza” Mª Ángeles, en plena acción, manifestando su buen estado físico, ante un chicarrón del norte y un riojano, ahí es nada.
Después del paseo, en una de las parrillas del lugar Emilio nos preparó unas truchas como era de suponer. Era pedido y no negado el poder saborear en el lugar dos truchitas de casi dos libras cada una.
Damos gracias a Dios por habernos permitido este hermoso paseo y convivencia entre nosotros. Tarea que en medio de tantas ocupaciones y responsabilidades pastorales, nos relaja y alimenta el camino para seguir en esta misión encomendada y nuestra vida fraterna.
Un abrazo
Chema sds.