Así se hacia un solo Grito de “Esperanza” de fortaleza y consuelo a tantos hermanos y hermanas que han sido asesinados por defender la Vida, por recuperar la Memoria histórica de los treinta años de violencia en Guatemala.
El día 21 de abril,2012.. invitados todos los cristianos, todos aquellos que desean recuperar la Memoria histórica, por la que murió Monseñor Gerardi, en la que invitaba a denunciar los atropellos y las masacres llevadas a cabo por ejercito y guerrillas, para poder intentar sanar heridas y corazones, y familias y poder llevar a la justicia a tantos que cometieron crímenes infames, violaciones y demás… nos reuníamos en la Catedral, para realizar una marcha que recuerde este acontecimiento y no se olvide que el camino de Jesús hoy en medio de nuestro pueblo, necesita unir esfuerzos, corazones y mentes en la búsqueda de la verdad, de la justicia y de una sociedad más humana y fraterna.
Posiblemente nos hemos reunido en esta marcha más de mil personas venidas de todas las comunidades de la Diócesis, donde participan todos los movimientos apostólicos y de lucha por la Paz, la Vida y la Justicia en Guatemala.
Bien sabemos que estas marchas están preparadas por un tiempo de reflexión antes y después, que quiere desde la no violencia-activa, sensibilizar.
Ayudar a tomar conciencia de la realidad que estamos viviendo hoy; después de 30 años de violencia, y de los acuerdos de Paz, todavía falta mucho camino por recorrer. Se están logrando varios resultaos de juicios y condenas a tanta agresión. Se siguen descubriendo fosas comunes, identificación de los seres queridos que dieron su vida, fueron asesinados vil y salvajemente.
Pero hoy la violencia sigue con otros rostros de jóvenes asesinados por maras y mafias del narco y del crimen organizado. Así como otras personas, padres o madres de familia que en sus trabajos, por robos o extorsiones siguen siendo asesinados. Se tienen cifras alarmantes que indican que mueren cada año más gente asesinada que en los tiempos de la violencia. Vamos a ver si este gobierno que se propuso “ ir reduciendo tanta violencia” da buenos resultados, pero sin caer en la opresión, control y militarización de las zonas en conflicto.
Se quiere involucrar en esta lucha por la Justicia y la Paz a todos los hombres y mujeres de buena voluntad y sensibles a esta realidad, sean de la religión o ideología que sean. Todos unidos en la búsqueda de la verdad y de la Paz en justicia para todos. No solo ayudar a tomar conciencia sino a promocionar personas que libres, personal y colectivamente ayude a buscar juntos alternativas y acciones solidarias para ir transformando esta realidad. No es tarea fácil. Casi la mitad de la población está involucrada en sectas y movidas de espiritualismo desencarnado, amén de la parte lamentable de haber estado involucrados en la violencia como soplones y delatores de los cristianos católicos y de sus movidas de organización y de búsqueda de soluciones que ataquen las causas de tantos tipos de violencia.
La búsqueda de trabajo digno, posibilidades de mejorar la vida, la dignidad de la persona humana, las estructuras de educación, sanidad y vías e comunicación, de posibilitar a precios justos la energía eléctrica, los servicios mínimos de vida, para que se pueda VIVIR DIGNAMENTE” es un reto y un desafío de todos para que todo esto no quede en la impunidad y se siga creando conciencia y posibilidades de una vida más humana, digna y libre, justa y solidaria para todos.
En la Iglesia de S .Pedro terminaba la marcha con una eucaristía, un encuentro de hermanos y hermanas que creen que el Señor sigue dando fuerza, esperanza y consuelo a este sufrido pueblo, y que el mal no tiene la última palabra. Al final vencerá el amor, la justicia y la paz para todos. Sigamos sembrando semillas del reino que nos cerque cada día más a este sueño que todos deseamos y sembramos con generosidad.
Un abrazo en Cristo Salvador y Liberador
Chema sds.